Los 15 mejores acantilados de Asturias

Los 15 mejores acantilados de Asturias

Qué ver en Asturias
Publicado el 25 Septiembre 2020
Los 15 mejores acantilados de Asturias

El Principado está repleto de lugares mágicos que visitar. Para disfrutar del lado más salvaje de la región, te recomendamos que visites los mejores acantilados de Asturias. Aprovecha para conocer sus faros, playas y probar su estupenda gastronomía. Echa un vistazo a los lugares que te recomendamos.

Visita los mejores acantilados de Asturias

Tómate el tiempo necesario para hacer este recorrido entre acantilados. Puedes apostar por ver varios acantilados en un día, o ir más despacio y detenerte un par de días en sus encantadores pueblos.

Acantilados de Busto, los más verticales de la costa

Te proponemos comenzar por el Cabo de Busto, desde donde podrás tomar el sendero circular del cabo de Busto (PR-AS 4), que recorre hermosas praderas verdes.

  • Es un sendero muy llano, así que es ideal para recorrer con niños, y te llevará entre castaños, pinares, fincas agrícolas y acantilados hasta el encantador Faro de Bustos.

Llegarás a los acantilados de Bustos, conocidos por ser los más escarpados de la costa y situados en las proximidades del Faro.

  • Desde sus miradores tendrás vastas vistas de la costa, desde el cabo Vidio hasta Luarca, con las bonitas playas del Serrón y de las Vatsinas y la isla del Salto.

 

Acantilados de Cadavedo, protegiendo el medievo

Acantilados de Cadavedo, protegiendo el medievo

Prosigue tu ruta hasta los acantilados de Cadavedo. En este pueblo se puede observar aún su herencia medieval. Además era un puerto ballenero. Para llegar hasta él, desvíate de la A-8 por la N-632a.

  • Visita sus acantilados, si quieres observarlos rodeados de praderas de ensueño, acércate hasta la Ermita de la Regalina. Este enclave es un balcón hacia el mar Cantábrico y los acantilados más espectaculares de la costa. Te sorprenderán no sólo los acantilados y las vistas, sino el lugar donde construyeron esta sorprendente ermita.

Después de visitar los acantilados, merece la pena hacer una parada en el pueblo y visitar sus hórreos, villas indianas y casinas con coloridos jardines.

 

Playa del Silencio

Acantilados de la Playa del Silencio

Sigue hacia el este. Llegarás hasta la playa del Silencio, la playa es de grava y merece la pena su visita, a pesar de que para llegar hasta ella hace falta un pequeño esfuerzo.

  • Una vez aparcado el coche en las inmediaciones, deberás caminar entre 10 y 15 minutos por un camino bastante empinado, pero perfectamente habilitado. No tendrás problemas para bajar si vas con la familia.
  • Esta playa, es conocida por ser una de las más hermosas de España. Parece minúscula entre los imponentes acantilados y frente a la cual encontrarás algunos islotes.

 

Cabo Vidio

Acantilados de Cabo Vidio, senderismo y aventura sobre acantilados

Prosigue la marcha hasta los acantilados de Cabo Vidio que se encuentran en la localidad de Oviñana. Algunos de estos acantilados llegan a medir 80 metros de alto. Para contemplarlos en todo su esplendor te recomendamos 3 enclaves concretos:

  • Mirador de Cueva: desde donde podrás disfrutar de las vistas sobre las playas de la Cueva y Peñadoiro y divisar Punta el Gallo y Punta los Altares entre las aguas.
  • Faro Cabo Vidio: a esta zona puedes llegar caminando o en coche. Si prefieres llegar hasta este punto en coche, hay una pequeña zona de aparcamiento. Además, no olvides llevarte un picnic, este área cuenta con mesas y bancos de madera donde disfrutar de las vistas mientras se merienda. Puedes acercarte más hacia la punta del cabo y divisar el Islote Chouzano.
  • Cueva de la Iglesiona de Cabo Vidio. Si la marea está baja (asegúrate muy bien de esto), es posible bajar hasta esta espectacular cueva. El descenso debe hacerse con sumo cuidado, no hay un camino construido y el último tramo hay que descender con la ayuda de una soga. Esta actividad no es apta para niños y tampoco para personas con vértigo.

Si te gusta el senderismo, estás de suerte. Caminando hacia el extremo norte o por el este tendrás vistas espectaculares de los acantilados de la zona. No dudes en caminar por las verdes praderas de este lugar.

Cabo de Peñas, a 120 metros sobre el mar

Pon rumbo hacia Avilés, una pequeña ciudad de Asturias que no puedes olvidar visitar por su gran patrimonio cultural de todo tipo. Está de camino y debes cruzarla para llegar hasta el Cabo de Peñas, por lo que es buena idea parar durante unas horas para recorrerla y disfrutar de su gastronomía.

Una vez llegas al Cabo de Peñas, puedes estacionar tu vehículo en un pequeño parking habilitado. Para disfrutarlo al máximo te recomendamos:

  • Visita el Centro de Recepción de Visitantes del Cabo de Peñas. Si cuando hagas la visita, encuentras abierto este centro, no dudes en visitarlo. Encontrarás cinco salas con exposiciones permanentes y la entrada cuesta tan sólo 1 €.
  • Recorre las pasarelas. En los alrededores del cabo, encontrarás pasarelas de madera por las que podrás pasear y disfrutar del paisaje.
  • Visita el Faro. Por su situación, el Faro de Cabo de Peñas es uno de los de mayor alcance en Asturias. Está situado a 120 metros sobre el nivel del mar y esta posición le proporciona un alcance de 40 millas.

Acantilados de Tereñes, tras las huellas del pasado

Continúa tu ruta por la AS-118, al pasar Gijón toma la A-8 y coje el desvío de la Carretera de Tereñes. Para acceder a los acantilados te recomendamos que dejes el coche aparcado en las inmediaciones y que continúes andando.

  • Los acantilados de Tereñes son considerados unos de los más bellos de Asturias y además cuentan con una importante historia tras ellos, ya que dejan expuestas rocas del Jurásico y puedes ver en ellas sus formas estratificadas.
  • Huellas del pasado. Si te acercas al Peñón del Forno, podrás ver contramoldes de las huellas de pisadas de diferentes dinosaurios. Sin duda, un lugar único en la comarca.

Acantilados del Infierno, desde donde contemplar la inmensidad del mar

Para continuar con esta ruta, dirígete hacia Ribadesella, cuando pases la ciudad, continúa por la AS-263 y desvíate por la carretera de Oreyana hasta llegar al Área Recreativa del Infiernu.

  • Aquí deberás dejar el coche estacionado y seguir a pie por el sendero hasta llegar a los acantilados donde podrás disfrutar de las vistas que nos ofrecen de la inmensidad del mar.

Podrás admirar las sorprendentes formas que se han formado tras siglos y estrellándose el mar contra las rocas.

Acantilados de Guadamía, contempla el modelado kárstico

Toma de nuevo la AS-263 y pon rumbo a los acantilados de Guadamía. Este enclave queda muy cerca de la Playa de Guadamía, una playa prácticamente fluvial perfecta para acudir con niños por su poco oleaje. Además, en las inmediaciones puedes realizar algunas pequeñas rutas.

  • Una vez en los acantilados de Guadamía camina por sus inmediaciones contemplando el modelado kárstico.
  • Apuesta por llevar un pequeño picnic y disfrútalo en las inmediaciones, dónde puedes encontrar algunas mesas y bancos para pasar un agradable día.

Acantilados y bufones de Pría, un espectáculo de la naturaleza

Muy cerca de los acantilados de Guadamía, encontrarás los bufones de Pría. Para llegar hasta ellos, aparca en Llames (cuidado, no lo confundas con Llanes) y sigue caminando por el camino de tierra entre hermosísimos prados hasta llegar. ¡No tiene pérdida!

  • Durante el camino verás las cuevas excavadas por el mar y escucharás el característico silbido provocado por el agua al impactar contra ellas.
  • Los días de temporal, el espectáculo de las olas batiendo contra las rocas es espectacular.
  • No olvides la cámara para inmortalizar este espectáculo de la naturaleza.

Acantilados de la Playa Cuevas de Mar, lugar de postal

Un poco más al este, tomando la carretera LLN-17 y desviándose hacia la izquierda en la AS-340 encontrarás la playa Cuevas del Mar, muy turística y cerca de la cual encontrarás rocas perforadas por un sinfín de cuevas y también una buena zona recreativa. Es otro buen lugar para parar con la familia.

  • Pasea sobre los acantilados o bajo ellos observando como el mar ha ido modelando todo el paisaje de la zona.
  • No olvides traer tu cámara de fotos, conseguirás imágenes de postal.

Acantilados de Póo, como si caminaras sobre el mar

En dirección a Llanes, desvíate en dirección a Póo y ve hacia la playa con el mismo nombre ¿Ves la playa o no? Todo depende de si es pleamar o bajamar.

  • Si la marea sube, la playa queda cubierta por agua de poca profundidad, formando una especie de piscina.
  • Cuando la marea está baja aparece la playa. Los acantilados no son muy altos, pero la pequeña playita casi totalmente rodeada de rocas ofrece una vista muy bonita.

Te recomendamos que contemples las vistas desde la Playa del Poo y desde los propios acantilados, al no ser muy altos te dará la impresión de estar sobre el mismísimo mar.

  • Camina por las praderas cercanas a ambos lados de la Playa del Poo y disfruta de estos pequeños acantilados.
  • Desde los acantilados de la parte derecha de la Playa del Poo, se pueden ver fácilmente el Islote Castro Pelado y el Castro de la Olla.

Acantilados de Cué, Asturias

Acantilados de Cué

Vuelve a tomar la AS-263 dirección Llanes. En este punto, te recomendamos dos planes diferentes, puedes realizar ambos o ir directamente a los Acantilados de Cué.

  • Entra en Llanes y después de conocer este concejo acércate a sus acantilados. Encontrarás otra playa que sólo aparece en bajamar. Dispones de dos grandes aparcamientos y zonas de picnic. Aprovecha para hacer una comida campestre y posteriormente toma el camino que se dirige hacia Punta Santa Clara o Punta Mohosa. Desde allí podrás ver lateralmente la playa de Cué y tendrás amplias vistas de toda esta zona de la costa y sus acantilados.
  • Si prefieres dirigirte directamente a los Acantilados de Cué, al pasar Llanes, desvíate por la LLN-2 hasta llegar a Cué. Una vez que hayas cruzado el pequeño concejo, dirígete hacia la Playa de Cué. Desde ahí puedes escoger entre disfrutar de los acantilados que puedes recorrer por sus verdes prados o atreverte con un baño es la playa donde puedes bucear sin encontrar saturación de personas.

Bufones de Arenillas, olas verticales

Vuelve a la A-8 y continúa hasta el desvío hacia la N-634 poniendo rumbo a los bufones de Arenillas. Aquí el mar impacta y sale con fuerza de forma vertical por las rocas, formando una columna de agua que parece un géiser.

  • Es un espectáculo único que no te puedes perder.
  • Lo puedes ver en otros acantilados de los que ya hemos mencionado, pero aquí tienes el más espectacular y que explica por qué los «bufones» se llaman así: por el bufido o silbido del mar al pasar entre ellos.

 

Acantilados de Cobijeru

Complejo kárstico Cobijeru y sus conductos subterráneos

Vuelve a la carretera y toma de nuevo la N-634. Al pasar Buelna, desvíate hacia la izquierda y continúa hasta Playa del Cobijeru.

  • Encontrarás este complejo protegido, declarado Monumento Natural.
  • Descubre Las Acacias, una de las pocas playas interiores de Asturias, comunicada con el mar mediante dos conductos subterráneos. En la zona interior se ubica el complejo kárstico, a través de una galería.

Acantilados y bufones de Santiuste

Apenas a unos kilómetros al este verás otro acantilado declarado Monumento Natural, de extraordinaria belleza. El mar impacta con fuerza contra él, produciendo los característicos silbidos y expulsando también una gran cantidad de arena al impactar.

  • Se considera uno de los bufones más altos de la costa oeste, ya que los chorros pueden alcanzar los 40 metros de altura.
  • Aprovecha para caminar por las verdes praderas que rodean este acantilado y sus bufones.

Sin duda, es un viaje que no te puedes perder si quieres recorrer los lugares más hermosos de la costa asturiana. Conoce de oeste a este los acantilados, bufones y cabos más espectaculares de la zona. Apuesta por un mini viaje de 4 días disfrutando únicamente de estos lugares y sus pueblos y aldeas cercanas.

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